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Undecanoato de testosterona y cambios en la presión ocular
La testosterona es una hormona esteroidea producida principalmente en los testículos en los hombres y en los ovarios en las mujeres. Es responsable del desarrollo de características sexuales masculinas, como el crecimiento muscular y la voz profunda, y también juega un papel importante en la salud y el bienestar general. Sin embargo, en los últimos años, ha habido un aumento en el uso de testosterona en el ámbito deportivo, especialmente en forma de undecanoato de testosterona, un éster de larga duración que se administra por vía intramuscular.
¿Qué es el undecanoato de testosterona?
El undecanoato de testosterona es un éster de testosterona que se utiliza en medicina para tratar la deficiencia de testosterona en hombres. Se administra por vía intramuscular y tiene una duración de acción prolongada, lo que significa que se libera lentamente en el cuerpo durante un período de tiempo prolongado. Esto permite una administración menos frecuente en comparación con otros ésteres de testosterona, como el enantato o el cipionato.
El undecanoato de testosterona se ha vuelto popular en el ámbito deportivo debido a sus efectos anabólicos, que incluyen un aumento en la masa muscular y la fuerza. Sin embargo, su uso también puede tener efectos secundarios no deseados, como cambios en la presión ocular.
¿Cómo afecta el undecanoato de testosterona a la presión ocular?
La presión ocular se refiere a la presión dentro del ojo y es un factor importante en la salud ocular. Un aumento en la presión ocular puede ser un signo de glaucoma, una enfermedad que puede causar daño permanente al nervio óptico y pérdida de la visión. Varios estudios han demostrado que el uso de undecanoato de testosterona puede aumentar la presión ocular en los hombres.
Un estudio realizado por Kicman et al. (2003) encontró que la administración de undecanoato de testosterona en hombres sanos aumentó significativamente la presión intraocular en comparación con un grupo control. Otro estudio realizado por Saad et al. (2009) también encontró un aumento en la presión ocular en hombres que recibieron undecanoato de testosterona durante un período de 30 meses.
Se cree que el aumento en la presión ocular se debe a la conversión de testosterona en dihidrotestosterona (DHT), una forma más potente de testosterona. La DHT puede afectar los receptores de andrógenos en el ojo, lo que lleva a un aumento en la producción de líquido intraocular y, por lo tanto, a un aumento en la presión ocular.
¿Quiénes corren el mayor riesgo?
Si bien el uso de undecanoato de testosterona puede aumentar la presión ocular en todos los hombres, hay ciertos grupos que pueden correr un mayor riesgo. Esto incluye a aquellos con antecedentes familiares de glaucoma, personas mayores de 40 años y aquellos con enfermedades oculares preexistentes.
Además, aquellos que usan undecanoato de testosterona en dosis más altas o durante períodos prolongados también pueden tener un mayor riesgo de desarrollar cambios en la presión ocular.
¿Cómo se puede prevenir o tratar?
Si bien el aumento en la presión ocular puede ser un efecto secundario no deseado del uso de undecanoato de testosterona, hay medidas que se pueden tomar para prevenir o tratar este problema.
En primer lugar, es importante realizar exámenes oculares regulares para detectar cualquier cambio en la presión ocular. Si se detecta un aumento en la presión ocular, se pueden tomar medidas para reducirla, como el uso de medicamentos
